Nakeisha Hills

“Permanecí en el [programa ROTC Junior] los cuatro años que estuve en la escuela secundaria… Para el último año, yo era en realidad la persona a cargo de toda la unidad.”

Mientras Nakeisha se destacaba en el programa ROTC Junior de la Marina, uno de sus instructores, un piloto de helicópteros retirado de la Guardia Costera, analizó con ella sus opciones para cuando terminara la educación secundaria.

“Mi instructor mencionó que la Guardia Costera era mucho más pequeña y que no había exclusiones por ser mujer a diferencia de otros Servicios.”

Su instructor también mencionó que la Guardia Costera estaba buscando reclutas de diversos orígenes. Como mujer afroamericana, esta información le resultó interesante a Nakeisha. Comenzó a investigar las oportunidades en la Guardia Costera, así como las universidades.

En colaboración con un reclutador y asesor universitario, en el otoño de 1990 Nakeisha se inscribió en la Universidad de East Stroudsburg y, en el verano de 1991, asistió al entrenamiento básico como reservista de la Guardia Costera.

“[El campo de entrenamiento] me daba miedo… No era buena para correr. Sabía nadar, pero no tenía el nivel de los socorristas. Por eso estaba un poco atemorizada… Pero sabía que era algo que deseaba con tanto fervor que el miedo no me detendría.”

Superar esos miedos, además de cumplir su promesa personal, hicieron que su graduación fuera una experiencia emotiva.

“Finalmente pude decirle a mi madre que no iba a ser una carga para ella… Iba a tener mi propio sueldo… Iba a poder ayudarla.”

Nakeisha se desempeñó como reservista de la Guardia Costera mientras terminaba su carrera universitaria. Hacía maniobras un fin de semana por mes en Governors Island, Nueva York, y trabajaba de subalterna en el Centro de Apoyo de Nueva York.

Después de graduarse, Nakeisha asistió a la Escuela de Aspirantes a Oficial. Nakeisha siempre quiso convertirse en oficial del servicio activo porque esto se traduciría en un aumento del liderazgo, del sueldo y del entrenamiento y la capacitación. Sin embargo, eso no quiere decir que el ingreso en la Escuela de Aspirantes a Oficial no haya inquietado a Nakeisha.

“Una vez más, se me destrozaron los nervios... No era Mark Spitz [nadador olímpico]… Pero estaba empeñada en lograrlo.”

La determinación y el compromiso de Nakeisha la sostuvieron a lo largo de la Escuela de Aspirantes a Oficial y, en último término, en una carrera militar que actualmente cursa su 18vo año. Hoy en día, Nakeisha se desempeña como jefa de planificación de contingencias y preparación de las fuerzas en el sector de la Bahía de Delaware de la Guardia Costera, donde facilita la preparación para respuestas ante emergencias. Ella y su personal mantienen planes que incorporan los recursos de la Guardia Costera y todos los demás recursos que aportan otros organismos de respaldo locales.

“Ante todo, somos la parte de la unidad que coopera con otros organismos y agencias… Como la Policía del Estado de Nueva Jersey o el Departamento de Protección Ambiental de Pensilvania… Por eso podemos responder en forma conjunta ante incidentes en el río Delaware y su bahía.”

Es una carrera que a Nakeisha le resulta gratificante y práctica. A través de la Guardia Costera, puede servir a su país y, al mismo tiempo, aprovechar exclusivos beneficios militares como la estabilidad laboral, una excelente atención médica y asistencia para el pago de los estudios. De hecho, con la ayuda de la Ley GI posterior al 11 de septiembre de las Fuerzas Armadas, Nakeisha actualmente cursa una maestría en comunicación estratégica, conocimientos que planea aplicar durante su prolongada carrera militar. La Guardia Costera no solo le permitió a Nakeisha superar ampliamente su promesa de ayudar económicamente a su madre, sino que también satisface su deseo de desempeñar un papel en algo muy superior a ella. Ese es el papel que Nakeisha espera desempeñar durante mucho tiempo.