Chanel Robbs

Nacida y criada en Brooklyn (Nueva York), Chanel empezó a interesarse por el servicio militar cuando estaba en la escuela secundaria. Se dio cuenta que utilizar los numerosos programas de ayuda para la matrícula de las Fuerzas Armadas la ayudaría a pagar la universidad. "El costo de los estudios y el miedo a ser complaciente me impulsaron a unirme", afirma. "Los beneficios educativos son algunas de las mejores oportunidades que me motivaron a estar en las Fuerzas Armadas; me encanta aprender y tengo tiempo suficiente para estudiar cuando llego a casa del trabajo. En la actualidad, estoy utilizando la ayuda para la matrícula para la escuela de posgrado, y todavía tengo mi beneficio de la Ley de Reajuste de Militares (GI Bill) para continuar mi educación si quisiera hacerlo".

El primer cargo militar de Chanel fue evaluar y neutralizar posibles amenazas para los Estados Unidos como operadora de sistemas espaciales en el Mando Espacial de la Fuerza Aérea. Cuando se creó la Fuerza Espacial en 2019, a muchos aviadores de la Fuerza Aérea se les dio la oportunidad de convertirse en guardianes de la Fuerza Espacial, que fue un movimiento que Chanel decidió hacer.

Como operadora de sistemas espaciales, Chanel y su equipo protegen los proyectos aeroespaciales de los Estados Unidos. "Nos aseguramos de que nuestros activos espaciales estén a salvo", afirma. "Hacemos modelos y análisis de amenazas para esos activos a fin de asegurarnos de que nadie está manipulándolos; utilizando distintos programas informáticos de modelado, informamos cada día al director de la Oficina Nacional de Reconocimiento. A veces, dependiendo de la gravedad de la amenaza, el informe puede llegar al Estado Mayor Conjunto y a los comandantes combatientes".

La importancia del papel de Chanel va mucho más allá de las Fuerzas Armadas. "Definitivamente hay un impacto global; estos satélites son utilizados por personas de todo el mundo: es el motivo por el que tu teléfono puede funcionar fuera del país o por la que no necesitas ser ciudadano estadounidense para utilizar el GPS. Hay que entender que estas cosas se utilizan en la vida cotidiana. Por ejemplo, tu teléfono necesita satélites para ir del punto A al punto B; incluso la comunicación habitual, la banca y el transporte público necesitan satélites".

A pesar del alto ritmo de su entorno laboral y de sus numerosas responsabilidades, Chanel no siempre está centrada en la última frontera. Ella y sus compañeros guardianes disfrutan de un gran equilibrio entre la vida laboral y personal. Esto permite a Chanel dedicarse a otros intereses fuera de las Fuerzas Armadas, como descubrir su talento para la jardinería y crear una importante colección de plantas. "Comprar plantas y cuidarlas me pareció un gran pasatiempo", dice. "Tengo cierto sentido de relajación al trasplantar las plantas y al poder tomarme mi tiempo y despejar la mente mientras las riego".

Chanel sigue disfrutando de su papel en la Fuerza Espacial. "Las Fuerzas Armadas te formarán para ser grande en tu campo y te demostrarán que puedes hacer cualquier cosa que te propongas. Hay muchas posibilidades", afirma.